En las tardes ardientes
En las tardes ardientes
Olga Savary
En las tardes ardientes
nada que hacer:
olvidar las manos
aquietadas como arañas
y atar el silencio
a la pura soledad
del silencio.
Olga Savary
En las tardes ardientes
nada que hacer:
olvidar las manos
aquietadas como arañas
y atar el silencio
a la pura soledad
del silencio.
Comentarios